Aprender va más allá de resolver ejercicios o memorizar datos. Para miles de niñas y niños en Guerrero, la educación también significa tener un espacio donde se sientan escuchados, valorados y seguros. En Niños en Alegría hemos aprendido que el acompañamiento emocional es tan importante como los libros o el aula.


El desafío emocional en las aulas guerrerenses

Muchos estudiantes en comunidades vulnerables enfrentan desafíos diarios que afectan su capacidad para aprender: violencia familiar, pobreza, duelo, abandono o ansiedad. Estas realidades no desaparecen al cruzar la puerta del salón de clases, y sin apoyo, pueden limitar su desarrollo escolar y personal.


Nuestro enfoque: acompañamiento que transforma vidas

En Niños en Alegría desarrollamos un modelo de acompañamiento estudiantil integral que incluye:

Este programa no solo busca atender emociones, sino fomentar la confianza, la autoestima y el sentido de pertenencia dentro de la comunidad escolar.

“Cuando una niña se siente apoyada, puede enfocarse en aprender, soñar y crecer con más libertad.”
— Facilitadora del Programa de Acompañamiento Estudiantil.


Resultados que inspiran

Gracias a este enfoque, hemos visto mejoras reales:

Hasta hoy, más de 75,000 niñas y niños han sido beneficiados, junto con más de 2,500 docentes capacitados.


Tú también puedes hacer la diferencia

¿Sabías que con solo $99 pesos al mes puedes ayudar a que más niñas y niños reciban este acompañamiento emocional que transforma sus vidas?

Súmate a esta cadena de impacto:

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Donar no solo apoya una educación digna. También construye un camino donde cada niña y niño pueda aprender con el corazón tranquilo.